Consejos para prevenir resfriados con una dieta equilibrada

El resfriado, una de las infecciones más comunes en los meses de invierno, es causado por virus que afectan al sistema respiratorio. Aunque no siempre se pueden evitar los resfriados, el sistema inmunológico es nuestra mejor arma para combatir este tipo de infecciones. Si no hay complicaciones asociadas, nuestras defensas podrán combatirlas en unos pocos días, aunque su duración y tratamiento va a depender de varios factores, como el tipo de virus y del estado general de salud de la persona afectada.

¿Cómo podemos fortalecer el sistema inmunológico a través de la alimentación?  Desde CODINAN te recordamos algunos consejos que te ayudarán a prevenir este tipo de infecciones.

Alimentación: la base para un sistema inmunológico fuerte

Una dieta equilibrada durante todo el año, que incluya alimentos con propiedades antioxidantes, bactericidas y antivirales, y ricos en vitaminas, minerales y proteínas, potenciará nuestras defensas naturales y contribuirá a que el organismo esté mejor preparado para combatir infecciones. También es esencial reducir el consumo de ultraprocesados, que solamente nos aportan calorías vacías, pero no los nutrientes necesarios para mantener unas defensas fuertes.

Otro aspecto a tener en cuenta es llevar a cabo una correcta pauta de hidratación, ya que ayuda a recuperar las pérdidas producidas por la mucosidad y estados febriles, así como a mantener las mucosas en buen estado y favorecer la protección frente a bacterias y virus. El agua, las infusiones y las sopas son aliados ideales para mantener el equilibrio hídrico, especialmente en épocas de resfriados.

Ten en cuenta, además, que modificar la alimentación dos días antes del invierno o atiborrarnos de suplementos cuando ya estamos contagiados no va a suponer una ventaja para evitar su aparición o reducir su duración y sus síntomas.

El papel de las frutas y las verduras

Para aprovechar al máximo sus nutrientes, lo más recomendable es consumir la fruta en piezas enteras, en lugar de hacerlo a través de zumos o batidos. Respecto a las verduras, la pauta a seguir debe de incluirlas tanto cocinadas como en crudo, puesto que hay nutrientes que se pierden con el cocinado mientras que otros mejoran su biodisponibilidad con el mismo.

La vitamina C, presente en frutas como naranjas, kiwis y fresas, y verduras como tomates, pimientos o espinacas, aunque no hay evidencia clara de que pueda prevenir la aparición del resfriado, sí parece ser que ayuda en el proceso de recuperación.

La vitamina A, que encontramos en zanahorias, boniatos o calabazas, contribuye a mantener unas mucosas sanas.

Las vitaminas del grupo B y las proteínas son fundamentales para el funcionamiento óptimo del sistema inmunitario.

Además de vitaminas, las frutas y verduras nos aportan otros nutrientes esenciales en la prevención y tratamiento de resfriados. Por ejemplo, el ajo y la cebolla contienen compuestos antimicrobianos, mientras que el jengibre aporta propiedades antiinflamatorias, ideales para aliviar molestias como el dolor de garganta.

Hábitos saludables más allá de la alimentación

Cuidar la alimentación es un aspecto básico, pero el resfriado no solo se previene a través de la dieta. Hábitos como realizar ejercicio físico de forma regular, descansar adecuadamente y controlar el estrés son igualmente importantes para mantener el sistema inmunológico en condiciones óptimas.

Desde CODINAN recordamos que cuidar nuestra salud debe ser un compromiso diario. Alimentarnos de forma consciente y mantener un estilo de vida saludable nos permitirá afrontar los meses de invierno con más energía y un mayor bienestar.