DÍA MUNDIAL DEL CORAZÓN

Hoy, día 29 de septiembre, se celebra el Día Mundial del Corazón. Con motivo de ello, desde CODINAN queremos recomendar unos simples pero a la vez importantes cambios para evitar que la incidencia de enfermedades cardiovasculares siga en aumento. El objetivo principal es desarrollar hábitos de vida saludables y, por lo tanto, obtener una mayor calidad de vida.

EL ÓRGANO DE LA VIDA

El corazón es un órgano imprescindible para la vida cuya función principal es bombear sangre a todo el cuerpo a través de los vasos sanguíneos. Mediante la circulación sanguínea los diferentes órganos reciben oxígeno y energía para la realización de las funciones vitales.

El sistema circulatorio tiene una gran capacidad para adaptarse a las distintas necesidades del organismo, bombeando diferentes volúmenes a diferentes frecuencias en función de la situación en la que se encuentre el individuo. Esta homeostasis es de especial importancia para gozar de una buena calidad de vida.

Figura 1. Estructura del corazón (enlace).

ENFERMEDADES CARDIOVASCULARES

La enfermedad cardiovascular es un término que hace referencia a patologías relacionadas con el corazón y los vasos sanguíneos, formando parte de las denominadas enfermedades no transmisibles:

Tabla 1. Tipos de enfermedades cardiovasculares (enlace).

La prevalencia de personas que padecen enfermedad cardiovascular ha ido aumentando en los últimos años, tal como se muestra en la Tabla 2 y la Figura 2 (enlace). Según los datos más recientes que proporciona el INE (enlace), las enfermedades del sistema circulatorio fueron la primera causa de mortalidad femenina en el año 2020 (264,7 muertes por cada 100.000) y la segunda entre los varones (241,1 muertes por cada 100.000) a nivel nacional. Además, los fallecimientos por esta causa aumentaron un 2,6% en hombres y un 2,9% en mujeres entre los años 2019 y 2020, según se indica en el último informe del INE sobre defunciones según la causa de muerte.

Tabla 2. Unidades expresadas en tanto por 100.000.

 

Figura 2. Prevalencia de enfermedades cardiovasculares en toda España. Datos de Andalucía, año 2020

MEDIDAS DE PREVENCIÓN: CUIDA TU CORAZÓN

La mayoría de factores de riesgo de las enfermedades cardiovasculares son prevenibles y controlables. Las principales recomendaciones para lograrlo son:

Alimentación saludable. Si seguimos una dieta saludable, esta nos aportará energía y nos proporcionará bienestar:

    • Consumo de vegetales frescos y variados. La presencia de vegetales en cada comida es un pilar fundamental. Trata de consumir al menos una ración de verduras en cada comida, aportando variedad de alimentos y combinando vegetales crudos y cocinados.
    • Cereales integrales. Trata de priorizar alimentos a base de cereales que sean de grano entero (integrales). En cuanto a panes y cereales de desayuno, asegúrate que no tengan azúcares añadido.
    • Consumo de omega-3. El consumo de omega-3 puede reducir ligeramente el riesgo de eventos cardiovasculares y arritmias (enlace). Algunos alimentos ricos en omega-3 son las semillas, como las de lino o las de chía, el pescado azul como el atún o el salmón, los frutos secos como las nueces, algunos frutos como el aguacate y en menor medida algunas verduras de hoja verde (lechuga, espinacas). El aceite de oliva virgen también posee omega-3 en su composición (enlace).
    • Reducir el consumo de alimentos ultraprocesados, comidas rápidas, embutidos y bebidas azucaradas. El consumo frecuente de alimentos ultraprocesados está relacionado con sobrepeso, obesidad, riesgos cardiometabólicos, cáncer, diabetes tipo 2, enfermedades cardiovasculares, síndrome de intestino irritable, depresión y mortalidad por todas las causas (enlace).
    • Reducir el consumo de sal, azúcar añadido y aceites refinados de baja calidad nutricional. El consumo de estos ingredientes de manera habitual tiene un efecto negativo en el estado de salud.
    • No consumir alcohol. El consumo de este tóxico tiene consecuencias directas, no sólo para la salud del consumidor, sino también para el entorno que le rodea (accidentes de tráfico, problemas familiares).

Mantener un peso saludable. La hipertensión arterial es, en muchos casos, comorbilidad de una condición de sobrepeso y obesidad. En cualquier caso, el exceso de peso influye de manera negativa en el estado de salud del individuo.

Revisiones médicas. Visitar al profesional sanitario de manera frecuente es una medida de prevención, pues permite realizar un seguimiento continuo de síntomas e indicadores de salud.

Disminuir el estrés. La presencia de elementos estresantes en nuestra vida, tanto en el día a día como en eventos concretos, puede suponer un aumento de la presión arterial. Asimismo, en determinadas situaciones de estrés, la frecuencia cardíaca puede verse alterada, produciéndose episodios de arritmia.

Hábitos de sueño. Se debe dormir al menos 6-8 horas para lograr un correcto rendimiento a nivel físico y cognitivo. La mala calidad del sueño contribuye a malos resultados sobre la salud (enlace).

Realizar actividad física. Abundantes estudios demuestran que existe una asociación consistente, lineal, inversa y de dosis-respuesta entre la actividad física y el riesgo de insuficiencia cardíaca (enlace).

No fumar. El humo del tabaco contiene más de 7.000 sustancias químicas que están directamente relacionadas con el desarrollo de, al menos, 70 tipos de canceres (enlace).